viernes, 31 de agosto de 2012

Cúcuta debe ser la ciudad ejemplo del bienestar femenino.

La mujer es la piedra angular de la familia, su bienestar es el bienestar de toda la sociedad.
El día de hoy el periodico El Tiempo publicó un artículo que con toda la tristeza nos encumbra en el quinto lugar de violencia de género en el país.   El artículo revela cifras oficiales que apenas son la punta del iceberg de lo que la silenciosa violencia de género (violencia contra la mujer) hace en nuestra sociedad.

Me atrevo a afirmar que las cifras son muchísimo más altas.  Muchas de las quejas y denuncias del maltrato son desestimadas por las autoridades porque " no son lo suficientemente graves" para ser una contravención a la Ley.
En la mentalidad del cucuteño es una práctica tolerable la intimidación y el maltrato a la mujer, vivimos en medio de una sociedad violenta que perpetúa sus prácticas machistas basandose en la repetición de modelos televisivos donde la mujer ocupa el lugar de mercancía y es apenas una arandela, un objeto sumiso atropellado por la bestialidad del protomacho colombiano: Un ser que "consume" a la mujer seleccionando el empaque con más curvas.

Esta horrenda realidad de todos los días que viven las mujeres explotadas, maltratadas y oprimidas ha llegado a un punto en el que tenemos que cambiar el rumbo.  Yo Liliana Mora estoy comprometida como única concejal (mujer) de Cúcuta, como madre y como persona coherente con sus ideas, sus promesas y su fe  con la gestación de un cambio, una rebelión que debe conquistar la dignidad que merecemos,  cultivada con amor, con educación a nuestros hij@s, con conocimiento, aplicación de la ley y la solidaridad para hacer valer nuestros derechos  y enderezar el torcido camino de la costumbre con el que nos hallamos "naturalmente oprimidas".

Trabajo por crear en la región una plataforma que de soporte en todos los aspectos a la familia y a la mujer, con la que la ciudad pueda llegar a ser el modelo a seguir en este cambio imparable al que nos han obligado las circunstancias.

 Ofrezco ayuda y asistencia a las mujeres víctimas de las vejaciones, acosos y maltrato,  y convoco desde aquí a esa red de mujeres que me escuchan y me leen a que tendamos a la mano y a que la empuñemos con rosas si es necesario para lograr establecer un orden en el que el equilibrio y la dignidad sean la normalidad.


Es el momento de los cambios, de las revoluciones de conciencia, y la nuestra es la Rebelión de las Rosas,  Una revolución cultural por nosotras y para nosotras.









1 comentario:

  1. Es necesario que se levanten estas potencias guerreras que saquen la cara por la mujer cucuteña, paisa, costeña bogotana, etc, y se empiece a manifestar la verdadera sociedad donde la mujer como piedra angular de la familia empiece a dar a conocer sus ideas y poner en marcha sus metas, proyectos y sueños, dando paso a un mejor futuro para un mundo donde la mujer a quedado relegada al pensamiento machista no solo de los hombres , sino de las mismas mujeres que han adquirido el pensamiento y la cultura de generaciones que han impuesto su posición degradante hacia la mujer.
    Pero porque quedarnos en el problema, si ha llegado la solución, gracias ¨potencia guerrera¨ por levantarte con una nueva visión y tras de ti levantar la visión de tantas mujeres que sabemos que es tiempo de despegar nuestros sueños de los zapatos de otros y tomar posición en la ´Rebelión de las Rosas´.

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